jueves, 12 de enero de 2012

La banca siempre gana

El nuevo gobierno, con la excusa de perseguir la economía sumergida y hacerla aflorar, ha aprobado una medida, cuando menos polémica: la prohibición de determinados pagos en efectivo por encima de los 1.000€.

Después de una animada discusión con los compañeros de trabajo me he animado a escribir este post para valorar esta medida.


¿Por qué una persona que se gana la vida trabajando por cuenta ajena (con nómina vamos) no puede hacerse un regalo y sacar su dinero del banco para comprar cualquier cosa con efectivo? Si tengo unos ahorros y me quiero comprar una tele de 2.000€, ¿por qué no puedo pagarlo con dinero contante y sonante? ¿para asegurarme que el vendedor lo declara? ¿y no sería más eficaz contratar a inspectores que se encarguen de perseguir esas actitudes? ¿o educar para evitar la evasión fiscal? ¿qué pasa con los que manejan ese dinero negro? ¿y qué tiene que ver esto con la banca?

Obviamente, los grandes beneficiarios son los bancos. Si estás obligado a pagar con tarjeta, ganan porque les cobran una comisión a los comerciantes. Si haces una transferencia, ganan porque te cobran una comisión a ti. Si pagas con un cheque conformado, ganan porque te cobran una comisión todavía mayor. Si no tenías cuenta bancaria (quizá quede algún caso en el que en vez de ingresar la nómina se pague con el antiguo método del sobre que le ahorra el coste de la transferencia al pagador), ahora no te quedará más remedio que tener una, con las consiguientes comisiones.

La economía sumergida creo que no aflorará, sino todo lo contrario, más bien se fomentará y se harán más cosas "bajo cuerda", es como la Ley seca, que lo que hizo fue justo lo contrario de lo que pretendía. Piénsalo, imagina que trabajas por cuenta propia y sin declarar nada o sólo lo imprescindible. Seguirás haciéndolo porque es tu cultura de vida y no tienes razones suficientes para hacerlo de otra forma, si no que seguirás buscando cada vez más formas para seguir funcionando de la misma manera e incluso promoviendo esa forma de actuar (porque te conviene, claro).

En cambio, tanto los comerciantes como los trabajadores por cuenta ajena, o sea, la gran mayoría de la población, los que no tienen nada que ver con esa economía sumergida verán coartada su libertad y encima tendrán que pagar por ello.

Desde luego esta medida es un regalo para los bancos, pero claro todo esto es lo que entre todos hemos elegido, y no sólo en las últimas elecciones, sino en las anteriores, y en las de antes también, y así podríamos seguir mucho más. ¿Qué pensáis vosotros? ¿Se os ocurren otras formas de hacer aflorar la economía sumergida sin que a los demás se nos encarezca el coste de la vida?

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Muchas gracias por tu comentario y por participar en el blog.

Entrada destacada

Mapas para moverse en bici por Madrid

Los que usamos la bici con cierta asiduidad por Madrid, probablemente conoceremos alguna forma de calcular rutas o ver por dónde podemos de...