En los últimos días he vivido un par de situaciones que me han demostrado lo que ya sabía por los libros: lo que nos resistimos los seres humanos a cualquier cambio que se nos presente en la vida y que no hayamos decidido nosotros, es lo que en psicología se llama la resistencia al cambio.
Si. Aunque creas que no te cueste adaptarte a los cambios, tu también presentas resistencia al cambio, aunque sea poca y casi no te des cuenta, porque cualquier cambio supone un golpe a tu acostumbrada manera de actuar y hay que digerirlo. Hay personas que son muy flexibles y se adaptan de nuevo rápidamente a los cambios. A la gran mayoría nos cuesta un poco más o un poco menos la adaptación, pero lo conseguimos. Y también hay personas que son más rígidas y todos los cambios les cuestan bastante. Pero todos pasamos continuamente por estos procesos, ya que son inherentes a la vida en sociedad, donde no podemos controlar todo lo que pasa a nuestro alrededor.
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