Para los que somos padres o tenemos contacto habitual con niños resulta llamativa la relación que tienen algunos padres y madres con sus hijos, en el sentido de que no siempre se comportan de forma lógica y coherente, llegando en ocasiones a situaciones más que absurdas.
Desde mi punto de vista, las obligaciones de todos los involucrados en el desarrollo de los pequeños (padres, tíos, abuelos, profesores, cuidadores) requiere de un gran esfuerzo mental y un continuo pensar en las consecuencias de nuestras palabras y actuaciones. Así es que debemos sentarnos a pensar seriamente lo que hacemos y lo que deberíamos hacer. No hay excusas. Es la obligación de los educadores.
Por lo tanto, empecemos por el principio: ¿qué es la educación?