La estación de Chamberí

Para la mayoría de los que hemos crecido en Madrid, la estación de Chamberí no es otra que la Estación Fantasma, una estación de metro que estaba situada entre las de Iglesia y Bilbao, en la línea 1 de metro y que cerró sus puertas en la década de los 60 debido a la ampliación de los comboyes de la línea, la dificultad que suponía por encontrarse en curva y por su cercanía con las otras 2 estaciones. Una estación que ahora está abierta al público y se puede visitar durante los fines de semana.

Cartel con el nombre de la estación.

Una opción de ocio, incluso para acudir con niños y sumergirles en la historia del metro madrileño. La visita a esta histórica estación puede realizarse durante cualquier día del fin de semana, bien sea por la mañana (de 11:00 a 13:00 horas) o por la tarde (de 17:00 a 19:00 horas) y consiste en un paseo por el vestíbulo de la estación en el que se pueden observar cómo eran las taquillas en los primeros años del metro de madrid, así como bajar al andén y comprobar in-situ los anuncios publicitarios que se mostraban en aquella época, con su lenguaje típico. Hablando del lenguaje, en uno de los anuncios ponía: "Sírvase apearse en ..." y no pude recordar a mi abuelo, un castizo madrileño que usaba ese tipo de expresiones y que siempre me maravillaron, desde aquí mi homenaje a un gran hombre.

Vista de las taquillas originales.

Cartel indicativo en el vestíbulo.

Toda la visita puede terminarse con la visualización de un vídeo que se proyecta continuamente en lo que era la entrada original a la estación, convertida en sala de proyecciones, pero además se realizan visitas guiadas en las que se explica con todo detalle las peculiaridades de esta estación y algunas otras cosas que sucedían en el metro de principios del siglo XX.

Vista del tablón con el plano del metro y las tarifas.

Y por si todo esto fuera poco dos cositas más: se hacen visitas guiadas totalmente gratuitas de unos 20 minutos de duración y si la visita te sabe a poco puedes continuarla en la Sala de Motores, que también se puede visitar gratuitamente y donde se encuentran los motores que se utilizaban para generar la electricidad que permitía que se moviesen los trenes. La sala de motores se encuentra en Pacífico y junto a la estación de Chamberí forma el denominado Andén 0. Desde aquí sólo puedo invitaros a verlo y prometer que os contaré cómo ha sido mi visita a la Sala de Motores, ¡qué pienso hacer en breve!